Opciones viables de corto y mediano plazo
A corto plazo, toma las siguientes 3 medidas en simultáneo:
1. Reprograma tus deudas con bancos: Solicita un aplazamiento en el pago de principal e intereses por 6 meses. Los bancos están aceptando hacerlo por plazos más cortos (30 a 90 días) pero eso ayuda. Ganas algunas semanas de caja y siempre puedes pedir una nueva ampliación. Hacerlo por más de 180 días se denomina “refinanciación” y afecta la clasificación crediticia de tu empresa, lo cual no te conviene.
2. Aplica al programa Reactiva Perú: Pide importe y plazo máximos permitidos. La tasa de este préstamo será significativamente menor al costo de fondeo de tu empresa, así que no te quedes fuera!
3. Negocia con tus proveedores: Extiende los plazos de pago y ofrece pagos parciales a cambio de que te sigan atendiendo. Si tus líneas bancarias están topadas, evalúa el uso de fondos de inversión y empresas de factoring para que adquieran las acreencias de tus proveedores, dándoles liquidez y dotándote a ti de mayores plazos de pago.
A mediano plazo, surgen alternativas de financiamiento interesantes:
1. Si tienes inmuebles, véndelos: Ser propietario de la planta, almacenes u oficinas no es el mejor uso del capital de la compañía. Enfoca tu capital en hacer crecer el negocio. Aquí los fideicomisos y fondos inmobiliarios de renta (FIBRAs o FIRBIs) son un comprador natural si estás dispuesto a firmar un contrato de largo plazo en calidad de arrendatario.
2. Emite deuda privada: Emite obligaciones para que sean adquiridas directamente por inversionistas privados o por un fondo de inversión. Accederás a un horizonte de pago más largo, podrás pagar parte del principal al final del cronograma (cuota “balloon”) y el ratio de garantías requerido será algo menor al exigido por los bancos. La tasa de interés será mayor a la tasa bancaria pero las cuotas a pagar serán menores dado el mayor horizonte de pago. En paralelo, prepara tu empresa para emitir deuda en el Mercado Alternativo de Valores (MAV). Hacerlo tomará tiempo e implicará incurrir en ciertos costos y gastos de emisión, pero pone a tu empresa en una posición de privilegio. Si logras mantener resultados financieros satisfactorios habrás generado una fuente de fondeo recurrente y tendrás una herramienta de negociación con los bancos. Al inicio emite deuda de corto plazo en el MAV. Conforme generes track-record podrás realizar emisiones más largas y en condiciones favorables.
3. Abre el capital a inversionistas. No es recomendable tener restricciones de capital de trabajo o niveles elevados de endeudamiento en épocas de recesión y es probable que te convenga incorporar un socio que aporte capital al negocio. Dada la coyuntura económica, conviene que mantengas un excedente de caja en vez de reducir endeudamiento con dichos recursos. Eso sí, busca un inversionista que aporte capacidades complementarias a las tuyas en beneficio del negocio. El aporte de un socio no debe limitarse al dinero.
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