Este domingo los peruanos decidiremos entre mantener un esquema democrático con una economía abierta, generadora de riqueza -aunque con grandes inequidades por atender- y el denominado “socialismo del siglo 21”.
Si optamos por la segunda opción afectaremos significativamente el clima de negocios y la inversión privada. Algunas consecuencias para el mercado de capitales local:
- A nivel País, probablemente se reducirá la calificación crediticia y se encarecerá el costo de financiamiento para los sectores público y privado.
- La inestabilidad en las reglas de juego, el mayor costo de fondeo y los topes impuestos a las tasas de interés restringirán el financiamiento bancario, con énfasis en las empresas pequeñas/medianas y las personas de a pie.
- La inversión privada se frenará para proyectos y empresas de todo tamaño. Se reducirá la demanda de empleo y, consecuentemente, aumentará el desempleo y la informalidad.
- Ello afectará el gasto privado y, por ende, los resultados de las empresas y la recaudación de impuestos. La anunciada restricción a las importaciones afectará aún más los costos y competitividad de las empresas locales.
- A nivel institucional, los fondos de pensiones estarán bajo amenaza. Se verán obligados a liquidar sus posiciones y estar invertidos en instrumentos líquidos, afectando el valor y rentabilidad del portafolio. Ello se traduce en menores pensiones para los jubilados y un menor nivel de inversión en el mercado de capitales local.
- La inversión en activos de menor liquidez -como el private equity, la deuda privada y el desarrollo inmobiliario- se reducirá, afectando la oferta de dichos instrumentos, única alternativa al financiamiento bancario para proyectos de mediano/largo plazo.
- Finalmente, los inversionistas privados de alto patrimonio trasladarán el grueso de sus activos invertibles al exterior y las personas con menores recursos contarán con pocas alternativas locales para rentabilizar sus debilitados ahorros.
Este domingo votemos a favor de mayores alternativas de inversión y financiamiento, de mayor producción y empleo, de mayores oportunidades para todos.