Dentro de un panorama económicamente incierto para muchos, el factoring es una solución que provee de liquidez a muchas empresas para seguir creciendo que muchas empresas han recorrido para seguir en un año con muchos retos.
El factoring es la solución por la cual la empresa convierte facturas (que vencen en unos meses) en efectivo en menos de 48 horas con un proceso completamente digital en un momento en el que las limitaciones obligan a tener procesos remotos. Mejora ratios de liquidez y reduce el endeudamiento dado que el financiamiento a través de facturas negociables no es considerado deuda financiera. Esto toma relevancia en una realidad en la que las líneas bancarias están altamente utilizadas y el sistema bancario no está incrementando exposiciones para preservar la calidad de su portafolio.
El mercado de factoring ha crecido a una tasa promedio anual de 76% entre 2016 y 2019, llegando a descontar mas de S/13.000 millones lo que representa el 7.3% del PBI. Este crecimiento ha estado soportado sobre un marco normativo cada vez mas claro, que busca promover el desarrollo de la pequeña y mediana empresa y que, a través de la adopción de la factura electrónica, pretende lograr que este mecanismo de financiamiento sea cada vez mas popular entre el empresariado peruano (fuente CAVALI).
Durante el año 2020 y pese a los efectos del COVID 2019, el volumen de facturas negociado superaba en 45% el volumen del año anterior y se habrían alcanzado por encima de las 700,000 facturas negociadas vs las 492.732 del año precio (fuente CAVALI). Parte de este resultado se debe a que el factoring ha sido considerado como una de las herramientas fundamentales para proteger las Mypimes y a la vez promover la inversión por lo que ha sido incluido en los decretos de urgencia con el otorgamiento de garantías del fondo reactiva para las entidades que fomenten el otorgamiento de liquidez a compañías que así lo necesiten.
Aun cuando se ha avanzado mucho en el Perú, queda un alto potencial por lograr para situarnos al nivel de economías mas avanzadas en esta materia como el de Chile o España donde los descuentos de facturas superan el 13% del PBI. El año 2021 reúne todas las condiciones para lograr el impulso pendiente, con un Estado convencido de que esta es una herramienta estratégica para canalizar recursos hacia el sector privado y a la vez un empresariado en busca de liquidez suficiente para reforzar sus negocios.
Desde MGi compartimos esta visión en la medida, que el descuento de facturas reúne las características para convertirse en la principal fuente de acceso a liquidez y reactivación del empresariado peruano. Es por esto que buscamos ser el aliado de empresas con alto potencial de crecimiento realizando evaluaciones ágiles y sistematizadas, (vs. calificaciones largas de los bancos), apalancándonos en la calidad crediticia de sus pagadores junto al historial de pagos de las facturas
